Gabriela Trillo Aguilar / redaccion@construarte.com.ve
El jardín Campo del Moro; ubicado en el Palacio Real de España (Madrid), fue declarado de interés histórico-artístico en el año 1931 por su espectacular infraestructura que ha sido conservada por años.
Fue trazado en 1844 por el arquitecto Narciso Pascual y Colomer, pero no fue hasta la última década del siglo XIX; durante la regencia de María Cristina Habsburgo cuando se terminaron de ejecutar las obras; y se procedió a la plantación de unos 9.500 árboles y 20.800 arbustos bajo la dirección de Ramón Oliva; quien decidió alterar un poco el concepto original (formalista) para seguir un estilo romántico de la naturaleza.
Este jardín es impresionante en sus 20 hectáreas. Posee solo tres entradas; una en la Cuesta de San Vicente (al norte); otra en la Cuesta de la Vega (al sur) y la principal en el Paseo de la Virgen del Puerto (al oeste).
En la web de turismo www.esmadrid.com describen el jardín Campo del Moro de la siguiente manera:
Impulsado en el siglo XIX por la Reina María Cristina, nos encontramos con un fabuloso jardín de estilo inglés decimonónico siguiendo el concepto romántico de la naturaleza.
Los terrenos del Campo del Moro no fueron ajardinados antes ante la imposibilidad de conectarlos con el Palacio Real; situado a mucha mayor altura. Esta posición elevada se aprovechó para crear una de las mejores perspectivas madrileñas; la del Palacio Real detrás de un gran tapiz verde jalonado por fuentes monumentales dentro de un amplio y sombrío jardín romántico. Los jardines cuentan con dos fuentes neoclásicas: la de los Tritones y la del Palacio de las Conchas.
Sin duda; este es uno de los lugares icónicos de la ciudad de Madrid que con su arquitectura narra la historia de aquél entonces y ofrece el mejor paisajismo en la actualidad.